Por la mañana dejamos Pamukkale y seguimos nuestra ruta para retomar la costa del Egeo y recorrer sus hermosos pueblos y playas.
Nos dirigimos a Dalyan para realizar un crucero por el río y ver las tumbas licias excavadas en la roca. Nada más llegar al pueblo, junto al río hay un montón de barcos para realizar estos cruceros. Basta con acercarse y negociar el precio. Nosotros cogimos un barco para nosotros solos por unos 25€.
Esta necrópolis del año 400 a.C. está formada por tumbas rupestres licias que fueron excavadas en los acantilados a lo largo del río Dalyan. La vista desde el río es verdaderamente impresionante. Las tumbas reales forman parte de los restos arqueológicos de la ciudad de Kaunos (también visitable), que cuenta con un teatro y una acrópolis.
El recorrido en barco puede acabar en la playa de Iztuzu, lugar de anidamiento de la tortuga boba. Aunque la playa está abierta al baño durante el día, hay zonas delimitadas con estacas, que indican el lugar de los nidos. Puedes acabar el recorrido aquí o hacer sólo un trayecto de una hora para ver las tumbas y disfrutar del paisaje.
Nosotros no fuimos a la playa y regresamos para comer en el centro, en el River House, a orillas del río, un pescado genial!
Después de comer llegada al hotel de Fethiye, el Okra Boutique. Un hotel muy sencillo pero justo en el paseo marítimo, junto al puerto.
Si tienes tiempo de pasear por Fethiye, puedes ir a la playa de Calis (donde se rodó Skyfall, de James Bond), visitar el centro con sus numerosas tumbas licias o hacer alguna salida breve en barco, al Valle de las Mariposas.
Fethiye ocupa el lugar de la antigua ciudad licia de Telmessos, de la que quedan algunos restos interesantes que podemos visitar.
En la antigüedad los habitantes de Telmessos tenían fama de adivinos. Se dice que Alejandro Magno llevó consigo en su gran expedición, a Aristander, el más famoso de todos ellos, que se encargaba de interpretar sus sueños.
Fethiye fue arrasada completamente por un terremoto en 1958 y, curiosamente, lo único que sobrevivió al temblor fueron los restos de la antigua Telmessos.
La ciudad moderna de Fethiye se extiende entre el borde del mar y los farallones rocosos donde se encuentran algunas de las más impresionantes tumbas de toda Licia. Las más grandes de estas tumbas están excavadas representando las fachadas de templos griegos, una característica que se encuentra en los recintos arqueológicos de la antigua cultura licia. La más destacada es la Tumba de Amyntas, que fue tallada hacia el año 350 antes de nuestra era. Hay que subir unas empinadas escaleras para llegar hasta ella. El interior está muy descuidado pero las vistas desde arriba son impresionantes.
Otro tipo de tumbas licias son sarcófagos con forma de pequeñas casas. Paseando por las calles de Fethiye se pueden encontrar varios ejemplos de ellos (una justo en el aparcamiento del hotel). Datan del 450 a.C y todos ellos fueron saqueados por profanadores de tumbas. También quedan restos de un teatro romano y de una fortaleza de los cruzados.
Cenamos en el paseo marítimo y nos fuimos a descansar.